Título: Viajar es crecer: ¿mucho o nada?
Entrevista a Alma Karla Sandoval
Por: Paloma Ramírez Torres
En un reducido salón de clases, donde apenas cabe un alfiler, se encuentra ella, sentada en el escritorio, con las manos entre las piernas y como atuendo un vestido café. Es Alma Karla Sandoval, distinguida periodista, poeta y profesora; apasionada en todo sentido por lo que hace, mujer decidida a luchar por las causas justas, amante de los libros y de la enseñanza. Habiendo pasado quince minutos después de las cuatro de la tarde, hoy jueves 26 de febrero nos concedió esta entrevista cuya finalidad es conocer la vida del estudiante latinoamericano que decide estudiar en el extranjero.
“Hace una década cuándo la globalización estaba en su apogeo, la competencia de internacionalización de los adultos jóvenes era muy importante. Ahora frente a una crisis económica de esta magnitud va a hacer más difícil que los adultos salgan, entonces nos vamos a ver obligados a buscar los beneficios de quedarnos en los países.”
Estas fueron las primeras palabras que Alma Karla nos dio para introducirnos al tema del intercambio estudiantil, viéndolo como la mejor opción a una brillante formación profesional para los hispanohablantes. Ante esto, iniciamos la entrevista preguntando:
--¿Para ti que significa viajar?, porque viajar también es abandonar.
--Bien dicen que irse es olvidarse, los ausentes siempre se equivocan. Para mí el viaje es una búsqueda, pero también es cierto que uno no puede llegar a una orilla sin abandonar las anteriores. La formación profesional se ensancha.
Nos hizo partícipes de sus experiencias acorde a sus viajes realizados a lo largo de su vida, como la han marcado y lo que le ha ayudado como profesionista.
--¿A falta de recursos qué puede hacer un joven para salir de su país ?
--Becas, becas, estudiar, estudiar, moverse, moverse y estudiar, tener un buen promedio y buscar las oportunidades.
Hoy en día es de suma importancia contar con estudios para conseguir un trabajo donde el pago no sea el salario mínimo. Sin embargo las ideas y el actuar de los latinoamericanos son distintos a los de, por ejemplo, los europeos.
--¿Con qué tanta apertura se recibe a los Latinoamericanos en Europa?
--Es una muy buena pregunta, es cierto que la discriminación existe, es cierto que estamos viviendo una época en la cual la ideología se está radicalizando. Depende el programa de estudio, hay programas y universidades donde te reciben con mucha calidez y mucho cariño al estudiante latinoamericano, en donde se quiere hablar con él, en donde se le tiene un lugar. Pero déjame decirte que no es un mito la discriminación, está ahí y uno tiene que aprender a lidiar con ella.
--¿Qué opinas de que los latinoamericanos tenemos una realidad muy distinta a la europea y aprendes de esa realidad?
--Bueno más que una realidad estás hablando de cuestiones culturales. Imagínate que te fueras a estudiar un semestre o irte a trabajar un año a China, lo primero que nos recomendaron cuando íbamos a ir a Beijín es que lleváramos ropa interior y tú dices bueno qué pasa, y es si llévate ropa interior nueva porque como las chinas son muy pequeñas, hombres y mujeres los chinos son muy pequeños, no encuentras ropa interior de tu talla. Los latinoamericanos somos muy cálidos y parranderos, nos estamos tocando todo el tiempo, no tenemos esa idea del sajón de trabajar y trabajar y trabajar.
Claro que nuestra realidad es distinta, los mexicanos nos caracterizamos por ser además de cálidos, ser de los mejores organizando fiestas, no en vano tenemos en nuestra República principales centros turísticos mundiales, caracterizados por su vida nocturna. Además que México fue posicionado en el 2007 por la Secretaría de Salud, en el segundo lugar a nivel mundial que cuenta con la mayor población obesa, así que definitivamente variamos en talla con los chinos.
--Hablando de nivel educativo, ¿cómo crees que sea el panorama de latinoamericana ante países de primer mundo? ¿Están en el mismo nivel?
--Depende que país de Latinoamérica, por ejemplo yo estuve estudiando en España en una universidad privada hasta el bachillerato que lo hice en escuelas de gobierno y me di cuenta que los colombianos que estudiaban conmigo y los brasileños tenían un nivel de cultura impresionante, entonces Latinoamérica en algunas ramas o en algunas disciplinas la educación supera a ciertos países de Europa, claro que si te vas a Alemania o a Francia olvídate.
Y es que Alma Karla ha estado en distintos puntos del mundo. Madrid en España, Bogotá en Colombia, Cuba, China, México, entre otros lugares la han formado para ser una mujer con decisiones.
--¿Viajar te hace crecer como persona?
--Pues eso dicen, yo he conocido gente que ha viajado mucho y como persona en vez de crecer se ha mantenido en una comunidad un poco adolescente. A veces los viajes dan ese peligro a la formación profesional de nuestros jóvenes que utilizan los jóvenes los viajes, sobre todo cuando tienen los recursos para hacerlo, para evadir ciertas realidades. Pero definitivamente nada es comparable con la experiencia de estar solo o sola en un país de una cultura distinta porque te obliga a aprender a cocinar o a lavar tu ropa si es que has vivido muy cómodo toda tu vida y no te has expuesto al peligro.
Alma Karla hizo este comentario con sarcasmo y risas, debido a que es cierto, cada quien aprende lo que quiere y le interesa, no necesariamente el hecho que una persona se la pase viajando quiere decir que sea una persona culta, intelectual o un excelente profesionista. Todo está en la disposición y las ganas que tenga cada quien.
--¿En qué momento de tu vida te diste cuenta de lo importante de viajar para formarte?
--Por lo regular todos nos vamos porque ya queremos cambiar de paisaje, porque queremos evadir una realidad, porque no aguantamos nuestra casa, porque no queremos casarnos después de la licenciatura. Claro que nunca se va a comparar vivir en Madrid por ejemplo, incluso en Bogotá donde la oferta cultural de museos es mucho más amplia, el hecho de vivir en una ciudad donde puedes ir a un museo casi diario impacta de alguna manera.
Es importante destacar que aún no es casada, por ello su mención anterior al decir que se debe aprovechar que aún no se cuenta con las responsabilidades de atender una familia, para así poder viajar y emprender aventuras globales.
--De los países que has visitado, ¿cuál ha contribuido más para tu formación profesional?
--Todos, bueno en Cuba aprendí mucho de literatura por ejemplo, en España también aprendí muchísimo sobre arte, pero a nivel ya académico en Colombia que fue más crítica literaria, teoría.
Se quedó pensando unos segundos, suspiró, como recordando sus experiencias o remontándose a sus recuerdos.
--¿Es mejor viajar como plan educativo de intercambio o viajar por gusto, aprovechar y aprender?
--Si puedes combinar ambas sería lo mejor, porque también es muy interesante estar en el ámbito académico con gente de distintos países y tener ese roce internacional porque uno nunca sabe dónde va a terminar viviendo, sobre todo ahora que el mundo es supuestamente tan abierto.
Viajar sin duda cambia el panorama de las personas, conocer otras cultural, intercambiar lenguajes distintos, leer, traducir, conocer sitios históricos universales. Es gratificante tener la experiencia, por ello se debe buscar la oportunidad y pronto, como bien insiste Alma Karla: “Ahora los boletos de avión se van a ir por las nubes, yo creo que sí es muy difícil salir, también va a ser mucho más difícil volver.”
--¿Qué lugares recomendarías a un joven para ir de intercambio?
--Pues por ahí dicen en las escuelas que no se vayan a países hispanoparlantes, que si van a hacer el gasto se vayan a un país donde se hable otra lengua, francés, alemán, inglés, japonés, para que desquiten la inversión. Yo creo que es muy conveniente irse de intercambio a un país que te plante un desafío con el idioma, a mi me gusta esa idea aunque también uno se tiene que ir a donde quiera, al país que le mueva y le apasione sino la formación no funciona.
“Hasta las maletas viajan, el que salga quiere decir mucho y al mismo tiempo quiere decir nada. Cada quien elige su destino, si en el objetivo en la cabeza de nadie no está salir pues bueno, pero es mejor que tuviera la experiencia, por qué no, aprendería muchísimo más”
Entrevista a Alma Karla Sandoval
Por: Paloma Ramírez Torres
En un reducido salón de clases, donde apenas cabe un alfiler, se encuentra ella, sentada en el escritorio, con las manos entre las piernas y como atuendo un vestido café. Es Alma Karla Sandoval, distinguida periodista, poeta y profesora; apasionada en todo sentido por lo que hace, mujer decidida a luchar por las causas justas, amante de los libros y de la enseñanza. Habiendo pasado quince minutos después de las cuatro de la tarde, hoy jueves 26 de febrero nos concedió esta entrevista cuya finalidad es conocer la vida del estudiante latinoamericano que decide estudiar en el extranjero.
“Hace una década cuándo la globalización estaba en su apogeo, la competencia de internacionalización de los adultos jóvenes era muy importante. Ahora frente a una crisis económica de esta magnitud va a hacer más difícil que los adultos salgan, entonces nos vamos a ver obligados a buscar los beneficios de quedarnos en los países.”
Estas fueron las primeras palabras que Alma Karla nos dio para introducirnos al tema del intercambio estudiantil, viéndolo como la mejor opción a una brillante formación profesional para los hispanohablantes. Ante esto, iniciamos la entrevista preguntando:
--¿Para ti que significa viajar?, porque viajar también es abandonar.
--Bien dicen que irse es olvidarse, los ausentes siempre se equivocan. Para mí el viaje es una búsqueda, pero también es cierto que uno no puede llegar a una orilla sin abandonar las anteriores. La formación profesional se ensancha.
Nos hizo partícipes de sus experiencias acorde a sus viajes realizados a lo largo de su vida, como la han marcado y lo que le ha ayudado como profesionista.
--¿A falta de recursos qué puede hacer un joven para salir de su país ?
--Becas, becas, estudiar, estudiar, moverse, moverse y estudiar, tener un buen promedio y buscar las oportunidades.
Hoy en día es de suma importancia contar con estudios para conseguir un trabajo donde el pago no sea el salario mínimo. Sin embargo las ideas y el actuar de los latinoamericanos son distintos a los de, por ejemplo, los europeos.
--¿Con qué tanta apertura se recibe a los Latinoamericanos en Europa?
--Es una muy buena pregunta, es cierto que la discriminación existe, es cierto que estamos viviendo una época en la cual la ideología se está radicalizando. Depende el programa de estudio, hay programas y universidades donde te reciben con mucha calidez y mucho cariño al estudiante latinoamericano, en donde se quiere hablar con él, en donde se le tiene un lugar. Pero déjame decirte que no es un mito la discriminación, está ahí y uno tiene que aprender a lidiar con ella.
--¿Qué opinas de que los latinoamericanos tenemos una realidad muy distinta a la europea y aprendes de esa realidad?
--Bueno más que una realidad estás hablando de cuestiones culturales. Imagínate que te fueras a estudiar un semestre o irte a trabajar un año a China, lo primero que nos recomendaron cuando íbamos a ir a Beijín es que lleváramos ropa interior y tú dices bueno qué pasa, y es si llévate ropa interior nueva porque como las chinas son muy pequeñas, hombres y mujeres los chinos son muy pequeños, no encuentras ropa interior de tu talla. Los latinoamericanos somos muy cálidos y parranderos, nos estamos tocando todo el tiempo, no tenemos esa idea del sajón de trabajar y trabajar y trabajar.
Claro que nuestra realidad es distinta, los mexicanos nos caracterizamos por ser además de cálidos, ser de los mejores organizando fiestas, no en vano tenemos en nuestra República principales centros turísticos mundiales, caracterizados por su vida nocturna. Además que México fue posicionado en el 2007 por la Secretaría de Salud, en el segundo lugar a nivel mundial que cuenta con la mayor población obesa, así que definitivamente variamos en talla con los chinos.
--Hablando de nivel educativo, ¿cómo crees que sea el panorama de latinoamericana ante países de primer mundo? ¿Están en el mismo nivel?
--Depende que país de Latinoamérica, por ejemplo yo estuve estudiando en España en una universidad privada hasta el bachillerato que lo hice en escuelas de gobierno y me di cuenta que los colombianos que estudiaban conmigo y los brasileños tenían un nivel de cultura impresionante, entonces Latinoamérica en algunas ramas o en algunas disciplinas la educación supera a ciertos países de Europa, claro que si te vas a Alemania o a Francia olvídate.
Y es que Alma Karla ha estado en distintos puntos del mundo. Madrid en España, Bogotá en Colombia, Cuba, China, México, entre otros lugares la han formado para ser una mujer con decisiones.
--¿Viajar te hace crecer como persona?
--Pues eso dicen, yo he conocido gente que ha viajado mucho y como persona en vez de crecer se ha mantenido en una comunidad un poco adolescente. A veces los viajes dan ese peligro a la formación profesional de nuestros jóvenes que utilizan los jóvenes los viajes, sobre todo cuando tienen los recursos para hacerlo, para evadir ciertas realidades. Pero definitivamente nada es comparable con la experiencia de estar solo o sola en un país de una cultura distinta porque te obliga a aprender a cocinar o a lavar tu ropa si es que has vivido muy cómodo toda tu vida y no te has expuesto al peligro.
Alma Karla hizo este comentario con sarcasmo y risas, debido a que es cierto, cada quien aprende lo que quiere y le interesa, no necesariamente el hecho que una persona se la pase viajando quiere decir que sea una persona culta, intelectual o un excelente profesionista. Todo está en la disposición y las ganas que tenga cada quien.
--¿En qué momento de tu vida te diste cuenta de lo importante de viajar para formarte?
--Por lo regular todos nos vamos porque ya queremos cambiar de paisaje, porque queremos evadir una realidad, porque no aguantamos nuestra casa, porque no queremos casarnos después de la licenciatura. Claro que nunca se va a comparar vivir en Madrid por ejemplo, incluso en Bogotá donde la oferta cultural de museos es mucho más amplia, el hecho de vivir en una ciudad donde puedes ir a un museo casi diario impacta de alguna manera.
Es importante destacar que aún no es casada, por ello su mención anterior al decir que se debe aprovechar que aún no se cuenta con las responsabilidades de atender una familia, para así poder viajar y emprender aventuras globales.
--De los países que has visitado, ¿cuál ha contribuido más para tu formación profesional?
--Todos, bueno en Cuba aprendí mucho de literatura por ejemplo, en España también aprendí muchísimo sobre arte, pero a nivel ya académico en Colombia que fue más crítica literaria, teoría.
Se quedó pensando unos segundos, suspiró, como recordando sus experiencias o remontándose a sus recuerdos.
--¿Es mejor viajar como plan educativo de intercambio o viajar por gusto, aprovechar y aprender?
--Si puedes combinar ambas sería lo mejor, porque también es muy interesante estar en el ámbito académico con gente de distintos países y tener ese roce internacional porque uno nunca sabe dónde va a terminar viviendo, sobre todo ahora que el mundo es supuestamente tan abierto.
Viajar sin duda cambia el panorama de las personas, conocer otras cultural, intercambiar lenguajes distintos, leer, traducir, conocer sitios históricos universales. Es gratificante tener la experiencia, por ello se debe buscar la oportunidad y pronto, como bien insiste Alma Karla: “Ahora los boletos de avión se van a ir por las nubes, yo creo que sí es muy difícil salir, también va a ser mucho más difícil volver.”
--¿Qué lugares recomendarías a un joven para ir de intercambio?
--Pues por ahí dicen en las escuelas que no se vayan a países hispanoparlantes, que si van a hacer el gasto se vayan a un país donde se hable otra lengua, francés, alemán, inglés, japonés, para que desquiten la inversión. Yo creo que es muy conveniente irse de intercambio a un país que te plante un desafío con el idioma, a mi me gusta esa idea aunque también uno se tiene que ir a donde quiera, al país que le mueva y le apasione sino la formación no funciona.
“Hasta las maletas viajan, el que salga quiere decir mucho y al mismo tiempo quiere decir nada. Cada quien elige su destino, si en el objetivo en la cabeza de nadie no está salir pues bueno, pero es mejor que tuviera la experiencia, por qué no, aprendería muchísimo más”
Qué bueno que ya está subiendo sus posts. Le recomiendo que revise el uso de la coma.
ResponderEliminarLa felicito por estas ganas de salir adelante. Cuenta con mi apoyo.